Si no bebe té de hibisco, seguro que conoce a alguien que lo consume a diario. Al fin y al cabo, se ha hecho muy famoso en los últimos tiempos por sus posibles beneficios en relación con la tensión arterial, el colesterol, la resistencia a la insulina y la pérdida de peso.

Al tratarse de un producto natural, algunas personas pueden imaginar que el té de hibisco es 100% seguro, que cualquiera puede tomarlo sin problemas y que no existen riesgos al consumirlo en exceso.

Pero, aunque sean naturales, incluso las infusiones pueden tener contraindicaciones, causar efectos secundarios y perjudicar cuando se utilizan junto con medicamentos y otras plantas y hierbas. Esta preocupación es aún mayor cuando se exagera el uso de estas infusiones.

Esto se debe a que existe el riesgo de que se produzca una interacción entre el té y algún medicamento ya utilizado para tratar alguna afección de salud. En otras palabras, el té puede interferir con la acción del medicamento, causando efectos perjudiciales.

Además, el té de hibisco nunca puede sustituir a un tratamiento ordenado por un médico para la hipertensión, el colesterol alto, la diabetes, la resistencia a la insulina o cualquier otro problema de salud. Sustituir un tratamiento completo sólo con té puede ser muy peligroso para su salud.

Es por ello que para disfrutar de los beneficios del té de hibisco sin ningún tipo de problema es necesario conocer los cuidados que se deben tener con ellos.

• Véase también: Beneficios del té de hibisco - Cómo prepararlo y cuidarlo

Personas que deben tener cuidado al consumir té de hibisco

Para algunos grupos, es necesario tener especial cuidado con el té de hibisco, por ejemplo:

• Personas que sufren de presión arterial baja;
• Personas con diabetes;
• Los que tienen programada una intervención quirúrgica para una fecha próxima.

Dado que el hibisco puede reducir la tensión arterial, las personas que ya la tienen baja corren el riesgo de que su tensión baje aún más al tomar la infusión, lo que puede provocar mareos y malestar general.

En el caso de los diabéticos, la preocupación se centra en la interferencia con el tratamiento de la enfermedad a través de la potenciación excesiva de los fármacos utilizados para tratar la diabetes.

Esto se debe a que cuando una persona que ya sigue un tratamiento contra la diabetes para mantener bajo control los niveles de glucosa en sangre empieza a consumir también hibisco, se corre el riesgo de que sus índices de glucosa bajen demasiado, provocando lo que se conoce como hipoglucemia.

Por lo tanto, es aconsejable que quienes ya traten la diabetes hablen con su médico antes de empezar a utilizar el hibisco.

En el caso de quienes vayan a someterse a una intervención quirúrgica, la recomendación es dejar de consumir el té al menos dos semanas antes de la fecha del procedimiento. La precaución es importante debido al efecto que el hibisco puede tener sobre los niveles de glucosa en sangre, lo que puede dificultar el control de estos índices durante y después de la cirugía.

Además, el té de hibisco no debe consumirse durante el embarazo ni la lactancia. En el embarazo, uno de los peligros es su efecto reductor de la tensión arterial, ya que algunas mujeres pueden tener la tensión más baja durante este periodo.

Otra preocupación es que pueda inducir la menstruación, según señaló un estudio de 2019. El té de hibisco y los extractos de hibisco pueden estimular el flujo sanguíneo al útero, lo que puede propiciar la menstruación.

En teoría, sus efectos secundarios podrían incluir cólicos, hemorragias, parto prematuro e incluso aborto.

Se cree que el hibisco puede tener efectos nocivos para el bebé y aún se necesitan estudios para determinar si es seguro o no durante este periodo. En caso de duda, la recomendación es actuar con precaución y evitarlo.

¿El té de hibisco dificulta el embarazo?

No existe consenso científico al respecto, pero estudios con animales han demostrado que una dosis elevada de hibisco puede aumentar los estrógenos, lo que puede perjudicar la fertilidad femenina.

Otras investigaciones han sugerido que el hibisco puede incluso perjudicar la fijación del óvulo fecundado a la pared uterina debido al desequilibrio hormonal causado por el aumento de estrógenos.

Pero cuando se trata de estudios en animales, que tienen un metabolismo diferente al humano, no es posible afirmar con certeza que los efectos sean exactamente los mismos para las personas.

Además, la dosis de hibisco evaluada en estos estudios era bastante elevada, superior a la que se encuentra en el té de hibisco consumido moderadamente a diario.

Sin embargo, para no correr riesgos, es más seguro que la mujer que pretende quedarse embarazada cuente con seguimiento médico y ponga en práctica algunas técnicas que pueden aumentar las posibilidades de quedarse embarazada.

¿El té de hibisco reduce el efecto de la píldora anticonceptiva?

Por otro lado, algunas mujeres que no desean quedarse embarazadas se preocupan por las sustancias que pueden "cortar" el efecto de la píldora anticonceptiva, y existe la duda de si el hibisco no tendría este efecto. Pero esta es una cuestión que debe evaluarse individualmente con el ginecólogo que acompaña a cada mujer.

Además, cada mujer tiene su propio perfil hormonal, con niveles hormonales diferentes a los de otras mujeres, por lo que la respuesta varía de un caso a otro.

Sin embargo, según la médico de familia y comunitaria Nicole Geovana, en general, el uso de té de hibisco junto con anticonceptivos no reduce el efecto anticonceptivo. Según la doctora, el efecto de los anticonceptivos puede reducirse cuando la mujer utiliza también ciertos antibióticos, antirretrovirales y anticonvulsivos.

Nicole también hizo hincapié en la importancia de utilizar el anticonceptivo correctamente y sin falta para garantizar que el efecto anticonceptivo se produzca como se espera.

Vigilar la cantidad

Al enterarse de los beneficios del té de hibisco, algunas personas pueden tener la idea de cambiar el agua por el té. Así, preparan una jarra de la bebida y la consumen a lo largo del día. Pero, hacer esto tiene dos problemas.

La primera es que, al hacerlo, la persona puede olvidarse de beber agua pura, que no debe ser sustituida por ningún otro tipo de líquido. El agua es fundamental para el organismo y necesitamos consumirla a lo largo del día para evitar la deshidratación y los problemas que conlleva.

Otro problema es el hecho de consumir una cantidad muy exagerada de té de hibisco, que, como se mencionó anteriormente, puede causar algunos problemas como la disminución de la presión arterial, la desregulación de los niveles de azúcar en la sangre, entre otros. Vale la pena recordar que todo en exceso es malo para usted, incluyendo los tés naturales.

Vigilar el origen del producto

Un cuidado muy importante para quienes toman té de hibisco es comprarlo de buena fuente. Por eso, antes de llevarse las hojas de hibisco a casa, compruebe que el producto sea de buena calidad, adquirido en un establecimiento autorizado y, preferiblemente, de una marca tradicional.

Recoger la flor directamente de un jardín porque cree que es un hibisco puede no ser una buena idea, ya que existe el riesgo de que no sea un hibisco.

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¡No dejes de ver lo que explica nuestra nutricionista sobre los cuidados que debemos tener con el té de hibisco!

Fuentes y referencias adicionales

• Hibisco, WebMD
• Herbal Tea Treatment of Oligomennerhea Condition with Hibiscus Rosa-Sinensis and Carica Papaya, Advances in Computational and Bio-Engineering pp 263-273