Conoce cuáles son las mejores frutas para el hígado que pueden ayudarte a tratar el hígado graso y otros problemas del órgano.

El hígado es uno de los órganos más grandes e importantes del cuerpo humano y no es de extrañar que se le conozca como el "guardián del cuerpo".

Esto se debe a que absorbe y filtra todo lo que comes o bebes realizando un proceso de filtrado que retiene todos los nutrientes que el organismo necesita y desecha los residuos, toxinas y sustancias excesivas que el cuerpo no necesita o que pueden perjudicarlo.

Además de ser el principal órgano de desintoxicación, el hígado desempeña muchas otras funciones, como metabolizar las grasas, los hidratos de carbono y las proteínas, equilibrar las hormonas y facilitar la digestión. A continuación resumimos las funciones del hígado y por qué es tan importante.

Existen varias causas para el hígado graso, así como otras afecciones, sin embargo, también hay formas de hacer una limpieza natural en este órgano a través de alimentos y tés que ayudan a tratar la grasa en el hígado, así como el consumo de algunas frutas que te enlistamos a continuación.

Debido a la creciente presencia de toxinas en el medio ambiente, es más importante que nunca cuidar este órgano vital.

¿Por qué es tan importante el hígado?

El hígado es un órgano que interfiere en muchas funciones diferentes, como la desintoxicación, la estabilidad de los niveles de azúcar en sangre, la formación de cetonas y la regulación de los niveles hormonales.

En particular, el funcionamiento lento del hígado es una de las principales razones por las que las personas tienen problemas con la hormona tiroidea, ya que en el hígado la T4 inactiva se convierte en la hormona tiroidea activa T3.

Mucha gente piensa que almacenamos toxinas en el hígado, pero esto no es técnicamente cierto.

En realidad, las personas desactivan y convierten las toxinas en una forma que pueden excretar a través de la orina, el sudor, el aliento y las heces gracias al hígado.

La única vez que las toxinas se almacenan alrededor del hígado es en la condición patológica llamada hígado graso, donde la persona acumula grasa alrededor del órgano y esta grasa es un almacenamiento de toxinas.

Un hígado sano es vital para una buena salud y aquí verás qué frutas debes incluir en tu dieta para mantenerlo sano.

La mejor fruta para el hígado

1. aguacate

El aguacate es una de las mejores frutas para el hígado porque es rico en fibra y tiene un contenido en grasas saludables.

Además, produce un compuesto llamado glutatión que ayuda a eliminar las toxinas nocivas del organismo.

El aguacate también es excelente para la salud del corazón, por lo que añadirlo a su dieta será una gran opción para mantener su salud y prevenir varios otros problemas.

2. pomelo

Este cítrico es rico en vitamina C y otros antioxidantes conocidos por proteger el hígado y ayudar a reducir la inflamación y prevenir el daño celular.

Los dos principales antioxidantes del pomelo son la naringenina y la naringina.

Un estudio japonés realizado en 2004 probó los efectos del zumo de pomelo en ratones y descubrió que suprime los daños del ADN en el hígado.

Se sabe que los efectos protectores del pomelo se producen de dos maneras: protegiendo las células y reduciendo la inflamación.

Los estudios también han demostrado que estos antioxidantes pueden reducir el desarrollo de fibrosis hepática, una enfermedad perjudicial en la que se acumula un exceso de tejido conjuntivo en el hígado, lo que suele provocar una inflamación crónica.

Además, durante el estudio, los ratones recibieron una dieta rica en grasas y la naringenina redujo la cantidad de grasa en el hígado y aumentó el número de enzimas necesarias para quemarla.

Este resultado demuestra que esta sustancia puede ayudar a prevenir la acumulación del exceso de grasa.

También se ha demostrado que, en ratas, la naringina mejora la capacidad de metabolizar el alcohol y neutraliza algunos de los efectos negativos de las bebidas alcohólicas.

3. Uvas

Investigadores del Departamento del Centro de Investigación de Medicamentos Aplicados de la Universidad de Ciencias Médicas de Tabriz (Irán) descubrieron que el extracto de semilla de uva mejoraba la función hepática en pacientes que padecían hígado graso no alcohólico.

Estudios en animales y humanos realizados por los Departamentos de Biociencia y Patología de la Universidad Federal de Sao Paulo indican que tanto la uva como los extractos de semilla de uva protegen el hígado de los daños, aumentan los niveles de antioxidantes y combaten la inflamación.

El estudio publicado en Revista Mundial de Gastroenterología informa de que las uvas, su zumo y sus semillas son ricos en antioxidantes que pueden ayudar al hígado reduciendo la inflamación y previniendo los daños.

Comer estas frutas enteras y con semillas es una forma sencilla de añadir estos compuestos a su dieta y disfrutar de todos los beneficios de las uvas para la salud.

Un suplemento de extracto de semilla de uva también puede aportar antioxidantes.

Limones y limas

Estos cítricos son ricos en vitamina C y una publicación en la revista académica Consumo de plantas y salud hepática sugiere que pueden reducir el daño hepático y, por tanto, se consideran frutas buenas para el hígado.

Esto se debe principalmente a que la vitamina C tiene una reacción enzimática con efecto en enfermedades hepáticas como la hepatitis vírica y la cirrosis hepática.

Es muy recomendable consumir estos cítricos por la mañana para estimular el hígado.

5. chumbera

El zumo y la pulpa de la chumbera, también conocida como opuntia, fruta de palma o higo del diablo, que es un tipo de cactus comestible, se utilizan habitualmente en la medicina tradicional para tratar enfermedades hepáticas, fatiga y úlceras.

Un estudio realizado en 2004 con 55 personas descubrió que el extracto de esta planta reducía los síntomas de la resaca.

Los participantes experimentaron menos náuseas, sequedad de boca y falta de apetito, y tuvieron la mitad de probabilidades de sufrir una resaca grave si consumían el extracto de esta fruta antes de ingerir bebidas alcohólicas.

El estudio concluyó que estos efectos se debían a una reducción de la inflamación, que suele producirse tras el consumo de alcohol.

Otro estudio en ratas descubrió que el consumo de extracto de higo chumbo ayudaba a normalizar los niveles de enzimas y colesterol cuando se consumía al mismo tiempo que un pesticida conocido por ser perjudicial para el hígado.

Un estudio más reciente realizado en ratas trató de determinar la eficacia del zumo de higo chumbo, en lugar de su extracto, para combatir los efectos negativos del alcohol.

Este estudio descubrió que el zumo disminuía la cantidad de daño oxidativo y hepático después de beber y ayudaba a mantener estables los niveles de inflamación y antioxidantes .

6. arándanos y arándanos rojos

Estas frutas pequeñas y jugosas son buenas para el hígado porque tienen un alto contenido en antioxidantes, como los polifenoles y las antocianinas, que son vitales para proteger el hígado de los daños.

Un resumen publicado en Revista Mundial de Gastroenterología indica que al incluir arándanos en su dieta, puede ayudar a aumentar las enzimas antioxidantes y la respuesta de las células inmunitarias.

Varios estudios con animales han demostrado que tanto estas frutas enteras como sus extractos o zumos pueden ayudar a mantener sano el hígado.

El consumo de estas frutas durante 3 o 4 semanas protegió al hígado de los daños y, en particular, los arándanos ayudaron a aumentar la respuesta de las células inmunitarias y las enzimas antioxidantes.

Otro experimento descubrió que los tipos de antioxidantes que suelen encontrarse en las bayas ralentizaban el desarrollo de lesiones, fibrosis y formación de tejido cicatricial en el hígado de ratas.

Además, se ha demostrado en estudios de probeta que el extracto de arándano inhibe el crecimiento de células de cáncer de hígado en humanos. Sin embargo, se necesitan más estudios para determinar si este efecto puede reproducirse en el cuerpo humano.

Este estudio sugiere que el consumo regular de estas frutas también puede ayudar a reforzar el sistema inmunitario.

Conclusión

Su hígado es un órgano muy importante con muchas funciones esenciales, por lo que debe protegerlo siempre.

Añadir a su dieta las mejores frutas para el hígado mencionadas anteriormente es una forma eficaz y extremadamente saludable de cuidar no sólo de su hígado, sino de varios otros aspectos de su salud.

Además, se consideran buenas frutas para el hígado graso debido a las propiedades que ayudan en el tratamiento de esta condición de salud.

Por si fuera poco, también ayudan a reducir el riesgo de cáncer, aumentan los niveles de antioxidantes y enzimas desintoxicantes, ofrecen protección contra las toxinas nocivas y combaten otras enfermedades hepáticas.

Incorporar estos alimentos a su dieta es una forma natural y saludable de mantener su hígado funcionando a pleno rendimiento.

Vídeo: Los 10 mejores alimentos para el hígado

Obtenga más información sobre los alimentos que son buenos para el hígado y consulte una lista de los que no son buenos para este órgano.

Vídeo: Los 6 peores alimentos para el hígado

Fuentes y referencias adicionales:

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