En una realidad en la que es muy fácil obtener información sobre cualquier tipo de tema -basta con buscar un tema en Internet y aparecen miles de páginas sobre él-, también es bastante fácil confundirse un poco para saber qué es verdad y qué es mito entre tantos datos.

Como el mundo del fitness no es ajeno a este problema y sabemos que hay muchos datos sobre el ejercicio y el entrenamiento que pueden dejar a la gente un poco confundida, hoy te traemos una lista de 7 datos en el área que pueden ayudar a despejar algunas dudas:

1. nadie es tan viejo que no pueda hacer ejercicio

Haber sido sedentario la mayor parte de tu vida no puede ser una excusa para acomodarte y no practicar ejercicios físicos porque crees que eres demasiado mayor, sólo tienes que conocer casos como el del estadounidense Jeffrey Life, que tras encontrarse a los 59 años hipertenso, con altos niveles de colesterol y con una dieta basada en hidratos de carbono y comida rápida, cambió su alimentación y comenzó a practicar ejercicios físicosy a sus 75 años tiene mejor físico que muchos veinteañeros.

Por supuesto, no hay que esperar a tener casi 60 años y ser hipertenso para empezar a cuidar la salud, cuanto antes mejor. Y esto tampoco significa que haya que convertirse en una rata de gimnasio supermusculada. Hacer ejercicio, aunque sea moderado, ayuda a la calidad de vida y puede contribuir a un envejecimiento más tranquilo.

2. beber mucha agua durante el ejercicio

Cuando tu profesor de gimnasia te insista en que debes beber mucha agua mientras haces ejercicio, que no se entere. La ingesta de líquidos es tan importante que cuando un músculo alcanza un nivel de deshidratación del 3%, su fuerza disminuye un 10%, así que la próxima vez que vayas a entrenar, ¡asegúrate de llenar unas cuantas botellas con abundante agua!

3. cuantos más músculos tenga, más energía gastará su cuerpo durante los periodos de descanso

Una de las grandes ventajas del crecimiento muscular en el organismo es obtener una mejora en el proceso de pérdida de grasa a través del cuerpo. La justificación para ello es que cuantos más músculos tenga una persona, más rápido será su metabolismo y, en consecuencia, mayor será la cantidad de grasa utilizada en la producción de energía, incluso cuando esté descansando entre una actividad y otra.

4. tu entorno social puede influir en tu forma física

Seguro que has oído el consejo "búscate un compañero de gimnasio" y quien te lo haya dicho tiene toda la razón. Tener un amigo a tu lado mientras haces ejercicio y sigues una dieta es una forma estupenda de mantenerte motivado y animar a tu compañero. Cuando tengas ganas de rendirte, puede estar ahí para ayudarte y recordarte...lo importante que es seguir adelante y cuidar la salud y la forma física.

5. no existe un momento ideal para hacer ejercicio

Si esperas al milagro del momento perfecto, cuando no tienes trabajo que entregar, comida que hacer, casa que limpiar, coche que lavar o atención que prestar a tus hijos, corres el riesgo de no poder dedicar tiempo a la actividad física.

Entendemos que hoy en día la gente vive en una rutina extremadamente ajetreada, pero dado que cuidar la salud y poner el cuerpo en movimiento es importante, es necesario cambiar de horario y hacer un esfuerzo para encajar una sesión de entrenamiento en el gimnasio o una carrera en la rutina diaria.

Puedes probar a levantarte antes y hacer ejercicio antes de ir a la universidad o al trabajo, e incluso crear una rutina de entrenamiento en la que participe toda la familia. De este modo, realizarás actividad física, animarás a tus seres queridos a llevar una vida más sana y podrás pasar más tiempo con ellos.

6. el ejercicio físico ayuda a mejorar la vida sexual

Si necesitabas otra razón para practicar ejercicios físicos aquí tienes una más: contribuyen a mejorar la vida sexual. Esto se debe a que una persona físicamente activa tiene más fuerza, energía y libido. Además, los ejercicios también pueden ayudar a reducir el estrés, un factor negativo para el rendimiento y el deseo sexual.

Las actividades aeróbicas, además de ayudar a mantener la excitación sexual, mejoran la capacidad pulmonar y la resistencia cardiaca, contribuyendo a la intensidad del sexo. Los ejercicios realizados en el suelo pueden ayudar en relación con la flexibilidad, que también es beneficiosa para la actividad sexual.

7. el sueño es fundamental para la eliminación de grasas

El sueño desempeña un papel importante en la quema de grasa debido a que cuanto más tiempo permanecemos despiertos, más energía necesita conservar el cerebro y más lento se vuelve nuestro metabolismo. Cuando esto ocurre, la pérdida de grasa también se produce más lentamente.

Por lo tanto, si quieres mandar lejos esas grasas, además de hacer ejercicio físico y llevar una dieta sana, no te olvides de dormir bien, durmiendo 8,5 horas cada noche.

¿No conocías alguno de estos datos interesantes sobre el fitness? ¿Crees que necesitas cambiar algo en tu vida relacionado con ellos? ¡Comenta a continuación!